De los cinco objetivos prioritarios de la Estrategia Europa 2020, el eje del “Cambio climático y energía” marca decisivamente un giro en la Unión Europea hacia una economía ‘verde’.
De hecho, desde los compromisos iniciales que asumieron los Estados miembros (20% de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero -en relación con los niveles de 1990-, 20% de energías renovables e incremento del 20% de la eficiencia energética), el horizonte ha cambiado de cara a 2030 (al menos 40% de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero -en relación con los niveles de 1990-, al menos 27% de cuota de energías renovables y al menos 27% de mejora de la eficiencia energética) y la Hoja de Ruta nos redirige hacia una economía hipocarbónica competitiva para 2050, que sea más respetuosa con el clima y consuma menos energía (reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en un 80% -en relación con los niveles de 1990-, pasando por alcanzar un 60% en 2040).
Con la contribución de todos los sectores, la Unión Europea asegura que esta transición es viable y económicamente posible. Pero esta ‘ecologización’ de la economía europea tendrá profundos efectos en el mercado laboral y en el desarrollo de las capacidades de los profesionales europeos, que deberán estar preparados con nuevas competencias.
Competencias ‘verdes’
El proyecto europeo Bus.Trainers ha detectado en sus investigaciones lagunas competenciales relacionadas con eficiencia energética y sistemas de energías renovables –denominadas ‘verdes’- en los formadores de Educación y Formación Profesional (EFP) de la industria de la construcción en Europa, entre las que destacan las relativas a Sistemas de certificación de edificios sostenibles, Etiquetado ambiental voluntario y Tecnologías emergentes.
Estos primeros resultados son: un “Informe sobre la brecha de competencias ‘verdes’ de formadores de EFP de la industria de la construcción” y un “Mapa y Perímetro de competencias ‘verdes’ final” -disponibles en su versión en inglés, y próximamente en español-, que analizan los datos recopilados por los once socios del consorcio, procedentes de España, Italia, Portugal, Grecia y Malta.
El informe identifica carencias formativas con las que se enfrentan los docentes que están proporcionando capacitación en eficiencia energética (EE) y sistemas de energías renovables (SER) en el sector. Además de este desajuste entre los conocimientos reales y los necesarios en ‘competencias verdes’ (Green skills), también se aborda otro tipo de necesidades pedagógicas y transversales.
Participación de casi 500 formadores europeos
Casi 500 formadores europeos han participado en estas investigaciones, que se han realizado a través de una metodología mixta de “world café”, análisis documental y análisis experimental, con una encuesta on line completada por 461 formadores y una entrevista semiestructurada, respondida por 30 personas.
Los resultados del cuestionario y las entrevistas muestran claramente la importancia de que los formadores tomen conciencia de la sostenibilidad en la construcción, así como la necesidad de nuevas actitudes de los docentes hacia la revolución digital.
Además, los resultados obtenidos cumplen con el objetivo de este proyecto, liderado por la Fundación Laboral de la Construcción, de producir contenidos de formación abiertos y dirigidos a la capacitación en construcción sostenible, a través de soportes e-learning y mobile learning.
Ambos documentos se utilizarán para diseñar una nueva cualificación sectorial europea y los contenidos de capacitación asociados para los formadores EFP que actúan en la industria de la construcción, que contendrán competencias para la promoción de EE y RES en edificios, fase en la que los socios de Bus.Trainers están trabajando actualmente.
Tras esta primera inmersión, los resultados apuntan a que los formadores de nivel III, II y I, según el Marco Europeo de Cualificaciones (EQF), son el nicho preferencial para este proyecto, ya que pueden tener mayores necesidades de capacitación.
Sin embargo, los formadores de los niveles IV y V que, en principio no se consideran un grupo preferencial para esta iniciativa, puesto que son expertos en la materia, podrán verificar y probar su conocimiento en el sistema de cualificación BuS.Trainers, que se creará en este proyecto, para contrastar si deben realizar o no capacitación adicional específica para cubrir las competencias potenciales. Esta capacitación también será proporcionada por el sistema.
Cinco áreas con una serie de competencias cada una
Los temas identificados se han dividido en cinco áreas: Legislación, etiquetado y certificación; Materiales, agua y técnicas de construcción; Eficiencia energética y fuentes de energía renovables; Diseño y gestión de proyectos; y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y Comunicación. Y cada uno, a su vez, ha sido identificado con una serie de competencias relacionadas.
En términos de necesidades en competencias ‘verdes’, se puede concluir que los formadores deben mejorar sus conocimientos en los temas sobre Legislación, etiquetado y certificación y sobre Diseño y gestión de proyectos. Por el contrario, respecto a los bloques sobre Eficiencia energética y fuentes de energía renovables y el de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y Comunicación, parecen ser más familiares para los docentes, que muestran mayor capacidad para la enseñanza.
Por otra parte, las competencias que presentan valores más altos de formación para los docentes, por su dificultad, son las siguientes: Estandarización de construcción sostenible; Sistemas de certificación de edificios sostenibles; Etiquetado ambiental voluntario; Tecnologías emergentes; Reutilización y reciclaje de Residuos de la Construcción y la Demolición (RCD); Deconstrucción; Sistemas Micro-Wind para la construcción del autoconsumo; Biomasa para calentamiento de agua; Biomasa para calefacción de espacios; Perspectiva del ciclo de vida; Costes del ciclo de vida; Integración; Estrategias de comunicación; Resolución de conflictos y mediación; y Estrategias de motivación. Por lo tanto, se reflejan como conocimientos y competencias que deberían incluirse en la nueva cualificación.